miércoles, 8 de abril de 2020

La suerte.



Siempre me gustó escuchar radio. Cada vez que tuve la oportunidad de sintonizar una buena emisora, lo hice. Cuando viví fuera de Colombia hice lo posible por oír las noticias de la tierrita. Internet no era tan avanzado, y nos tocaba buscar algún lugar en la ciudad a donde la señal entraba y así enterarnos de lo que pasaba en Colombia.

Estaba en mi casa escribiendo una carta. Se usaba esa máquina de escribir de teclas, y como siempre, mi radio al lado. De pronto el locutor dijo: Según la tradición china, hoy es el día de la suerte. Todo el que tenga una cámara cerca, hágase una foto, porque hoy es el día ocho del mes ocho del año 1988, entonces a las ocho y ocho minutos de la mañana todos estaremos haciendo una imagen de nosotros mismos y su suerte cambiará.

La foto que publico es exactamente de ese momento, menos mal tenía rollo, trípode, y esperé el momento y zas!!! ahí está.

¿Mi suerte cambio? No, porque la vida no es suerte, la vida es esfuerzo, dedicación, visión, ideas claras, perseverancia, justicia, rectitud, y mucho pero mucho trabajo. No creo en la suerte, creo que Dios nos capacitó a todos para ser excelentes. Unos aprovechamos más que otros, unos somos mas arriesgados que otros, pero todos los seres humanos en el entorno en que hayamos nacido somos gente de oportunidades.

Usted me dirá que los que nacen en hogares con comodidades son mas afortunados que otros, yo le digo que sin importar donde hayamos nacido, si aprovechamos la capacidad que tenemos, y desarrollamos todo el potencial no necesitamos de suerte.

Suerte no es que tengamos un amigo político y nos de un empujón para obtener un puesto en una entidad, eso es trampa, corrupción. Suerte no es encontrarse una bolsa con dinero, eso es ser deshonesto porque debe tener un dueño, suerte no es esquivar una piedra en el camino, eso es providencia Divina, protección de Dios. Suerte no es conseguir la ayuda idónea, eso es tener discernimiento y hacer las cosas bien, porque una esposa linda y amable que no se apaga con el tiempo, es porque alguien la ha cultivado honrándola. Suerte no es que los hijos le salgan buenos, eso es una educación y principios sembrados desde pequeños. Suerte no es tener una casa propia, eso es esfuerzo, trabajo y empeño.

Así que la foto quedó solo para el recuerdo, porque mi vida ha sido espectacularmente bella y lo seguirá siendo sin necesidad de suerte. 

Hasta pronto.

Alonso.


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