Las misiones son trabajo espiritual y físico, porque llevar el mensaje de salvación a los perdidos implica hablar con muertos espiritualmente hablando.
Hay un mundo espiritual bueno que son los servidores de Dios, y hay un mundo de maldad que son Satanás y sus demonios, ellos también están en la esfera espiritual.
Entendiendo que hay fuerzas contrarias o que se oponen al trabajo espiritual de bondad, que es la predicación del evangelio dejo aquí algo que me pasó precisamente con el mundo de maldad. Usted luego sacará sus conclusiones.
Era el año 2002, estábamos con mi familia alojados permanentemente en el Hotel Roos de la ciudad de Schoonhoven en Holanda. La vecina del frente nos había pedido de favor de cuidar su casa mientras ella iba a pasar sus vacaciones al sur de Francia. Nosotros con gusto nos ofrecimos y recibidas las instrucciones del cuidado de la casa entramos en ella. Una construcción de tres plantas, un gran jardín, y una bañera.
El día pasó normal, mi esposa hizo almuerzo, vimos televisión, los hijos fueron a las piscina porque era el verano, y así nos fuimos a la cama a dormir como a las 10 de la noche.
A las tres de la mañana sentí que alguien entró a mi pieza, estaba despierto segundos antes, ya que algo me puso en alerta. Oí los pasos pensando que era uno de los niños, pero de pronto se subió a la cama, sentí una gran opresión en el pecho y tomó mi garganta. Estaba aterrorizado. Mis fuerzas comenzaron a faltar, así como el aire. Y en mis pensamientos sabía que alguien tenía puestas sus rodillas en mi pecho y me estaba ahorcando.
Entonces intenté gritar pero no pude, y cuando a mi mente vino La Palabra,
"LA SANGRE DE CRISTO TIENE PODER, lo dije pero usando el poco aire que me quedaba y enseguida, lo que había encima me soltó y pude sentir como salía de la habitación. Entonces grité con fuerza otra vez: La sangre de Cristo tiene poder. Mi esposa se despertó, prendió la luz y yo que apenas estaba recuperando el aliento le conté lo que pasaba.
Ella me regañó, me dijo que era consecuencia de comer tarde de la noche y que me volviera a dormir. Ore un rato, pensé si había sido sueño o realidad, y volví a quedarme dormido. Al día siguiente nada comentamos, pensando que había sido una pesadilla. Pero a las tres de la tarde, los gemelos volvieron a ir a la piscina del pueblo y nosotros nos quedamos solos. Yo me quedé en el computador en el primer piso y mi esposa dijo: "Me voy a recostar un ratico" y se subió.
No había pasado media hora, cuando ella bajo pálida como una hoja de papel, y temblando me dijo: "ESA COSA TAMBIÉN ME ESTABA AHORCANDO A MI".
He leído mucho sobre el tema y hay variadas opiniones. Se que La Sangre preciosa del Señor Jesucristo es para perdón de pecados, pero hasta dónde es también para protección de los escogidos. ¿Puedo entonces invocar La Sangre preciosa cuando me vea atacado por el enemigo? Cuidado!! No quiero convertirla en un fetiche. Dios me libre!!! ¿Cuál es tu opinión??
Hasta pronto.
Alonso
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