Texto: Ecl 10:5 Hay algo más que he visto en esta vida y que no es justo. Es un error muy común entre los gobernantes.
Ecl 10:6 Le dan cargos importantes a gente incapaz, mientras que los sabios ocupan posiciones sin importancia.
Ecl 10:7 He visto sirvientes montando a caballo, y a gente que debiera ser gobernante caminando como esclavos al pie de ellos.
Ecl 10:4 No abandones tu trabajo sólo porque tu jefe se enfada contigo. Si permaneces calmado puedes corregir los más grandes errores.
Muchas cosas no son justas en esta vida, muchas otras las vemos desde nuestra óptica y consideramos justas o injustas, pero Dios sabe exactamente donde tocar la tecla del instrumento de nuestras vidas con el fin de crecer espiritualmente. En este caso se trata de la paciencia.
La paciencia es el fruto del amor, si ya el amor es el fruto del Espíritu, entonces la paciencia llega a ser el resultado de cultivar el amor. usted le tiene paciencia a sus hijos porque los ama, de lo contrario los echaría a la calle.
Así entonces vemos que personas incapaces son puestas en altos cargos, ganan buenos salarios, y solo podemos mirar y aprender, ya que no debemos aplicar nuestra propia justicia, pues en realidad no sabemos el trasfondo de todas las cosas.
por lo general cuando uno llega a una congregación, el deseo es servir, es una reacción natural del espíritu, querer hacer algo. Pero si lo ponen en algún cargo, los que llevan sentados diez años sin hacer nada se enojan.
En el ámbito laboral secular, siempre va a haber desacuerdos, confrontaciones, porque el mismo agobio del trabajo, el cansancio, la necesidad de dar resultados, puede llevar al empleado a sufrir acoso por parte de quienes dirigen la empresa.
Aquí hay un consejo que lo he considerado por años: Ecl 10:4 No abandones tu trabajo sólo porque tu jefe se enfada contigo. Si permaneces calmado puedes corregir los más grandes errores.
Este versículo de Eclesiastés nos ofrece una valiosa lección sobre la importancia de la resiliencia y la calma en el ámbito laboral. A continuación, se presenta una reflexión sobre sus diferentes aspectos:
1. Mantén la calma ante la adversidad:
En el mundo laboral, es inevitable que haya momentos de tensión y desacuerdos con nuestros superiores. Sin embargo, es fundamental no dejar que las emociones negativas nos dominen. Renunciar impulsivamente a nuestro trabajo por un enfado momentáneo del jefe solo traerá consecuencias negativas a largo plazo.
2. Busca soluciones con serenidad:
Un espíritu sereno nos permite analizar la situación con claridad y buscar soluciones prácticas a los problemas. En lugar de reaccionar de forma impulsiva, debemos enfocarnos en encontrar la mejor manera de corregir los errores y mejorar nuestro desempeño.
3. La paciencia como herramienta:
La paciencia es una virtud clave en el ámbito laboral. Nos permite mantener la calma ante las dificultades, perseverar en nuestros objetivos y aprender de los errores. No hay problema que no pueda solucionarse con paciencia y dedicación.
4. El valor de la perseverancia:
Renunciar a nuestro trabajo ante la primera dificultad no es la solución. La perseverancia nos permite superar los obstáculos y alcanzar nuestras metas. Mantenernos firmes en nuestro trabajo nos ayudará a crecer profesionalmente y a obtener mejores resultados.
5. La importancia de la comunicación:
En muchas ocasiones, un simple malentendido puede ser la causa de un conflicto con nuestro jefe. Es importante mantener una comunicación abierta y honesta para aclarar cualquier situación y evitar que las pequeñas molestias se conviertan en problemas mayores.
Recuerda: Tu trabajo es importante, no lo abandones por un simple enfado. La calma y la paciencia te ayudarán a superar cualquier obstáculo.
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