En la selva de América del Sur, existe una tribu indígena, que toma un ave, le arranca las plumas y en la herida le aplica la secreción de cierto sapo.
Las plumas renacen con colores llamativos, pero la nueva apariencia del pájaro no altera su carácter.
Algunas personas cambian externamente, pero su corazón no es aprobado delante de Dios.
Si no naces de nuevo no puedes entrar al reino de los cielos, le dijo Jesús al fariseo Nicodemo, tienes que nacer del agua y del Espíritu.
¿naciste de nuevo? Se logra, aceptando a Jesús como el Señor y salvador.
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